Aves en entornos urbanos: los parques como refugios de vida silvestre en el Occidente de Panamá

Birds in urban environment:parks as wildlife refugies in Western Panama

Los parques urbanos juegan un papel fundamental en la preservación de la biodiversidad relicta en entornos urbanizados. Se realizó un estudio de la avifauna presente en cinco parques urbanos en la Región Occidental de Panamá (David): Altos del Morazán, Ivu Primavera, 28 de Noviembre, Plaza Bolívar, Paco García. Se reportaron 450 individuos distribuidos en ocho ordenes, 18 familias y 33 especies. Las especies más abundantes fueron: el Perico Barbinaranja (Brotogeris jugularis), la Tortolita Rojiza (Columbina talpacoli), la Tangara Azuleja (Thraupis episcopus), el Sotorrey Común (Troglodytes aedon) y el Tordo Coligrande (Quiscalus mexicanus). Tres especies migratorias fueron registradas: Empidonax sp., Piranga rubra y Setophaga petechia. La información presentada es de línea base y aporta al conocimiento sobre la biodiversidad en entornos urbanos del Occidente de Panamá.

Aves, biodiversidad, conservación, Panamá, parques urbanos.

Urban parks play a fundamental role in preserving relict biodiversity in urbanized environments. A study was carried out on the birdlife present in 5 urban Parks in the Western Region of Panama (David): Altos del Morazán, Ivu Primavera, 28 de Noviembre, Plaza Bolívar, Paco García. A total of 450 individuals distributed in 8 orders, 18 families and 33 species were reported. The most abundant species were: the Orange-chinned Parakeet (Brotogeris jugularis), the Ruddy ground dove (Columbina talpacoli), the Blue-gray Tanager (Thraupis episcopus), the House Wren (Troglodytes aedon) and the Great-tailed grackle (Quiscalus mexicanus). Three migratory species were recorded: >Empidonax sp<., Piranga rubra and Setophaga petechia. The information presented is baseline and contributes to knowledge about biodiversity in urban environments in Western Panama.

Keywords

Urban Parks, biodiversity, Panama, birds, conservation.

Los parques urbanos tienen un papel fundamental en la preservación de la biodiversidad de estos entornos modificados, brindando refugio y alimento a una variedad de especies vegetales y animales, generalmente representativos de la biodiversidad local y en algunas ocasiones de especies migratorias (Muñoz et al., 2021).

Los espacios, que brindan los parques urbanos no solo proporcionan áreas de recreación para los habitantes de las ciudades, sino que también actúan como corredores que permiten la conectividad entre diferentes ecosistemas fragmentados por la urbanización. Según estudios recientes, la creación y conservación de parques urbanos son esenciales para contrarrestar la pérdida de biodiversidad en entornos urbanos cada vez más densificados (Wang et al., 2017).

Las actividades antropogénicas y su aumento demográfico asociado, propician un desarrollo urbano no sostenible dado la eliminación de cobertura arbórea, áreas verdes dentro de las urbes y merma de la biodiversidad urbana. La práctica de cementar y pavimentar estructuras para rutas viales y edificaciones, así como la eliminación de ecosistemas dentro de las ciudades tiene como consecuencias aumento de la contaminación atmosférica y el aumento de temperatura (Dhorde et al., 2009; Kataoka et al., 2009); lo que genera islas de calor (Fuentes Pérez, 2014) y la pérdida de biodiversidad, factores que consecuentemente colaboran con la aceleración del cambio climático. Las ciudades, son uno de los factores que más contribuyen al cambio climático, estas consumen el 78 % de la energía mundial y producen más del 60 % de las emisiones de gases de efecto invernadero. Sin embargo, abarcan menos del 2 % de la superficie de la Tierra (PNUMA, 2005).

Una variedad de estrategias han sido históricamente implmentadas en diferentes áreas geográficas, para mitigar los efectos detrimentales causados al entorno natural, como producto del desarrollo urbanístico; esto, con el fin de mejorar la calidad de vida de la población humana y la persistencia de la biodiversidad local (Martínez-Valdés et al., 2020; Penteado y Alvarez, 2007; Varas et al., 2021).

En la Región Occidental de Panamá, se desarrolla la iniciativa de arborizar parques urbanos de la ciudad de David, como una estrategia para mitigar las consecuencias de la expansión urbana y para conservar la biodiversidad asociada a estas áreas verdes. Esta ciudad, cuenta con una rápida expansión y transformación paisajística, lo que genera gran preocupación, pues los efectos ambientales asociados a estos tipos de cambios en zonas urbanas, son ampliamente documentados desde tiempos ancestrales (Riad et al., 2020); y cuyos efectos impactan el paisaje, la flora y fauna local (Muñoz et al., 2021).

Las aves, son un grupo taxonómico ampliamente utilizado como indicadores para valorar la diversidad e integridad de ecosistemas (Mekonen, 2017), estas coexisten en casi en todos los ecosistemas del planeta y representan un buen punto de partida para conocer la condición que presentan los remanentes arbolados en nuestros ecosistemas urbanos.

Existen alrededor de unas 10 mil especies de aves que están presentes en una gran cantidad de hábitats (Callaghan et al., 2021; Xiao et al., 2017); debido a la sensibilidad que algunos grupos taxonómicos muestran en cuanto a cambios de estructura y composición de sus comunidades, en respuesta a cambios en la cadena alimenticia y a las alteraciones del ambiente, estas son consideradas como indicadores de la salud de los ecosistemas. Según BirdLife International, un 40 % de las especies de las aves del mundo (3,967) tienen tendencias de población en declive, un 44 % son estables (4,393), 7 % que están aumentado (653) y 8 % con tendencias desconocidas.

Las aves brindan múltiples servicios ecosistémicos, entre ellos, regulan la incidencia de las enfermedades y especies plagas, son fuentes de alimentación, participan en la polinización de los cultivos y especies silvestres, además de estar vinculados en actividades recreativas y culturales antropogénicas (Gaona & Rodríguez, 2015; Williamson, 2010).

La finalidad de este trabajo es documentar la presencia de aves asociadas a parques urbanos, localizados en la Ciudad de David en la Región Occidental de Panamá; los cuales se muestran como entornos cada vez más frecuentes. La información generada, se vincula con los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2030; en particular, los objetivos 11: ciudades y comunidades sostenibles; 13: acción por el clima y 15: vida de ecosistemas terrestres.

El registro de las aves se realizó por observación directa apoyados en el uso de binoculares Simmons ProSport, objetivo de 50mm; se utilizó una cámara Canon Powershot Sx 70 HS para documentar las aves; la georreferenciación de los sitios se realizó con un dispositivo GPSMAP 64sx Garmin. Se utilizó como base para la identificación taxonómica de especies, la plataforma e-Bird (Sullivan et al., 2009) y la guía de aves de Panamá (Angehr & Dean, 2010); para los nombres comunes se utilizó la lista de Aves de Panamá 2023 (AUDUBON-PANAMÁ, 2023). El área de estudio comprendió 5 parques urbanos en el Distrito de David, en la Región Occidental de Panamá; estos son: el Parque 28 de noviembre (8°25'18.1"N 82°25'59.5"W), Parque Altos de Morazán (8°25'27.2"N 82°24'58.5"W), Parque Paco García (8°25'43.6"N 82°25'46.7"W), Parque Ivu Primavera (8°24'42.3"N 82°25'58.4"W), Parque Plaza Bolívar (8°25'27.6"N 82°25'17.6"W).

Se realizaron sesiones de registro de aves mensuales en cada parque, en mayo-junio-julio y en octubre-noviembre-diciembre de 2021, generando seis sesiones en cada parque y 30 sesiones en total. Estas sesiones de muestreo de aves corresponden, la primera, a la época de reproducción de aves residentes (Brawn et al., 1999); y la segunda a la temporada de reproducción de aves migratorias neotroicales.

Para el registro o conteo de las aves, se aplicó la metodología de conteo estacionario, con el fin de caracterizar la comunidad de aves en un mismo punto de muestreo en cada parque. En estos conteos, se consideraron las recomendaciones del protocolo de muestreo del Programa de América Latina para las Aves Silvestres, PROALAS, implementado en la base de datos de eBird del Laboratorio de Ornitología de la Universidad de Cornell (Ruiz et al., 2020). Las observaciones se llevaron a cabo en un rango horario entre 7:00 am - 10:00 am. Durante los conteos se registraron todas las aves vistas y/o escuchadas durante 15-20 minutos.

Se registró un total de 450 individuos; los cuales representaron 33 especies de aves distribuidas en ocho órdenes y 18 familias (tabla 1). El Orden predominante de aves es el Passeriformes, con 11 familias registradas (61.11 %). Los meses en los cuales se registró un mayor avistamiento de aves fueron junio y octubre (tabla 2). En cuanto a la representatividad por familia, en Psittacidae (4 especies), Thraupidae (5 especies) y Tyrannidae (5 especies), registraron el mayor número de especies.

Las especies más abundantes fueron: el Perico Barbinaranja (Brotogeris julgularis) (23.33 %), la Tortolita Rojiza (Columbina talpacoli) (14.22 %), la Tángara Azuleja (Thraupis episcopus) (9.77 %), el Sotorrey Común (Troglodytes aedon) (7.55 %), y el Tordo Coligrande (Quiscalus mexicanus) (5. 33%).

Tabla 3. Estado de conservación y dieta de las especies de aves reportadas en Parques Urbanos del Distrito de David.

FAMILIA	ESPECIE	NOMBRE COMUN	ESTATUS*		DIETA**
			UICN/MiAmbiente		Mayor	Menor
Columbidae	Columba livia	Paloma Común	LC	R	G	FR
	Patagioenas cayennensis	Paloma Colorada	LC	R	G	FR
	Columbina talpacoti	Tortolita Rojiza	LC	R	G,FR	I
Cuculidae	Crotophaga ani	Garrapatero Piquiliso	LC	R	I	FR
	Piaya cayana	Cuco Ardilla	LC	R	I	FR
Trochilidae	Heliomaster longirostris	Heliomaster Piquilargo	VU	R	N	I
	Amazilia tzacatl	Colibrí Cola Rufa	VU	R	N	I
Accipitridae	Gampsonyx swainsonii	Elanio Chico	VU	R	C	--
	Rupornis magnirostris	Gavilán Caminero	VU	R	C	--
Picidae	Melanerpes rubricapillus	Carpintero Coronirojo	LC	R	I	FR
Falconidae	Milvago chimachima	Caracara Cabeciamarillo	LC	R	C	FR
Psittacidae	Eupsittula pertinax	Perico Carisucio	VU	F	R	--
	Brotogeris jugularis	Perico Barbinaranja	VU	F	R,G	N,FO
	Amazona autumnalis	Loro Frentirrojo	VU	R	FR	FO
		Loro	VU	R	FR	FO
Tyrannidae	Megarynchus pitangua	Mosquero Picudo	LC	R	I,C	FR
	Todirostrum cinereum	Espatulilla Común	LC	R	I	--
	Tyrannus melancholicus	Tirano Tropical	LC	R	I	--
		Bienteveo Común	LC	R	I	--
	Empidonax sp.	Atrapamoscas	VU	M	I	--
Hirundinidae	Progne Chalybea	Golondrina Pechigris	LC	R	I	--
Troglodytidae	Troglodytes aedon	Soterrey Común	LC	R	I	--
Mimidae	Mimus gilvus	Sinsonte Tropical	LC	R	I	--
Turdidae	Turdus grayi	Mirlo Pardo	LC	R	I	G
Passeridae	Passer domesticus	Gorrión Común	LC	R	G	I
Fringillidae	Spinus psaltria	Jilguero Menor	LC	R	FR	FO
Icteridae	Quiscalus mexicanus	Talingo	LC	R	FR,G	C
Cardinalidae	Piranga rubra	Tangara Veranera	LC	M	I	FR
Thraupidae	Thraupis episcopus	Tangara Azuleja	LC	R	I	FR
	Thraupis palmarum	Tangara Palmera	LC	R	FR	I,N
	Sporophila corvina	Semillero Variable	LC	R	G	FR,I
	Coereba flaveola	Mielero Reinita	LC	R	N	FR,I
*Estado de la Lista Roja de la UICN / Ministerio de Ambiente, 2016. LC: Preocupación menor; VU: Vulnerable; EN: Peligro crítico; R: Residente; M: Migratorio **Dieta según Sociedad Nacional Audubon. Guía de Aves, Kenn Kaufman© 1996/Cornell Lab Ornithology. C: Carnívoro; I: insectívoro; H: Herbívoro; FR: frugívoro; FO: folÍvoro; G: Granívoro; N: nectÍvoro; R: rizófago.

Discusión

Los meses de mayor avistamiento de aves en los parques muestreados, es congruente con el avance de la estación lluviosa (junio) y el mes de mayor precipitación pluvial en Panamá (octubre) (Amador, 1988; Name y Villarreal, 2004), período en el cual muchas especies de plantas florecen o bien ya producen sus frutos, y la abundancia de insectos se incrementa, ofertando a las aves una variedad de fuentes nutricionales. El incremento en las precipitaciones en la región, también coincidió con un aumento, anecdótico, de la presencia de insectos asociados a ambientes más húmedos o dependientes de cuerpos de agua para su reproducción. En los parques evaluados, fueron evidentes insectos como mosquitos (Culicidae), las cucarachas (Blattidae), las chinches hediondas (Pentatomidae) y termitas (Kalotermitidae); los cuales podrían representar un recurso importante en estos paisajes transformados, que ya cuentan con una reducida representación de insectos nativos.

La curva total de acumulación de especies (figura 1), muestra lo que podría ser el inicio de una asíntota en su incremento, es decir que se podría estar cerca de conocer el número de especies que habitan los parques muestreados. La figura, muestra un bajo incremento en el registro de especies nuevas en los meses de noviembre-diciembre, lo que coincide con el cambio de estación hacia la estación seca. Esto podría suponer, una disminución de recursos alimenticios adicionada a la escasez intrinseca de estos hábitats, en donde las aves locales se desplazarían a usar espacios boscosos con mayores recursos.

En los meses de octubre, noviembre y diciembre, se registraron especies migratorias, lo cual es congruente con el reporte de aves migratorias en otras regiones del país (Guevara y Samudio, 2021), esto evidencia la importancia de estos fragmentos de hábitats durante el paso o bien estadía de estas aves en el país.

La transformación histórica del paisaje en la Región Occidental de Panamá (Castro Herrera, 2006; Suarez, 1981), en la que se encuentran los parques estudiados, ha generado cambios en la estructura y disponibilidad de las comunidades de invertebrados, que pueden ser alimento para las aves; ante este escenario, especies con dietas muy especializadas como las rapaces (figura 2) y los colibríes contaron con una representatividad taxonómica relativamente baja; aun así llama la atención que estos grupos aun persisten en estos hábitats. Otras especies con una espectro de dieta más amplia, tuvieron una mayor representatividad taxonómica relativa, muy probablemente debido que las capacidades de adaptarse a estos entornos, en lo referente a la dieta, también promueve una disparidad poblacional con respecto a las poblaciones de especies con dietas especializadas, lo cual influye en la frecuencia de los avistamientos.

El perico barbinaranja, fue la especie con mayor número de registros (105 avistamientos) en los Parques muestreados; esta especie se considera común en la región, y ha sido reportada como abundante en otras áreas alteradas, pero mejor conservadas, en tierras bajas de Panamá Central (Guevara y Delgado, 2021). La reproducción en esta especie en la región, ocurre durante febrero-marzo, tiempo en el cual anidan en casas de comejenes y troncos huecos (observaciones personales), por lo que el incremento general de avistamientos en los meses junio-octubre, podrían incluir individuos juveniles. Esta especie también se muestra abundante en Ciudad de Panamá, en donde encontramos congregaciones muy numerosas, que utilizan los árboles de la Vía Argentina para pernoctar (observaciones personales), lo que implica la adaptabilidad de la especie a estos entornos urbanos y la importancia de la vegetación presente en los mismos.

La composición de plantas en los parques muestreados y en su periferia, incluyen árboles como el mango (Mangifera indica) y aguacate (Persea americana) los cuales brindan un recurso alimenticio para especies como los psitácidos. En los parques, también se encuentan árboles de higo (Ficus aurea), tulipán africano (Spathodea campanulata), mirto (Myrtus communis), nance (Byrsonima crassifolia), naranja (Byrsonima crassifolia), guarumo (Cecropia peltata), entre otros que brindan protección y alimento para la persistencia de las especies reportadas.

Sobre el estado de conservación, nueve especies se encuentran en categoría de vulnerable por la UICN, condición a su vez reconocida por el Ministerio de Ambiente de Panamá (Gobierno-de-Panamá, 2016); entre estos, el Colibrí Colarrufa (Amazilia tzacatl) y el Colibrí Piquilargo (Heliomaster longirostris). Entre las principales amenazas identificadas para estas especies están, el cambio climático, la transformación de los hábitats naturales, la captura para su comercio, y la mortalidad causada por mascotas (Mekonen, 2017; Tejera y de Tejera, 2001).

Los parques urbanos estudiados en la Región Occidental de Panamá presentan una baja diversidad en comparación con hábitats no alterados; sin embargo los datos sugieren que estos espacios promueven la persistencia tanto de aves residentes, así como de especies migratorias y de un número de especies en categoría de vulnerable. La información presentada es de línea base y aporta al conocimiento sobre la biodiversidad en entornos urbanos del Occidente de Panamá.

Agradecemos por el apoyo recibido durante las labores de campo al personal de la Dirección de Gestión Ambiental del Municipio de David, Ilsa Vega Landau y Manuel Vega; a Roger Ríos del Instituto de Ciencias Ambientales y Desarrollo Sostenible (ICADES); a los revisores anónimos de la revista y a C.N. Modelo por los aportes durante la revisión del manuscrito.

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